domingo, 2 de mayo de 2010


Ahora que está tan de moda eso de los grupos de feisbuk, diré que "Raúl se unió a 'Si no fuera de puro bueno tan gilipollas, cuánto mejor me irían las cosas'".
Anoche me tocó en la mesa un subnormal que no hacía más que comentarios desagradables y de menosprecio a mi trabajo. ¿Cuándo podré tirarle la jarra del café abrasando por la cara y quedarme tan ancho? Hijo de puta.
El mundo me queda un poco grande últimamente, y cabrones me sobran. ¿Quién quiere uno?

7 comentarios:

  1. No sabía que tenías blog
    pero te sigo desde ya¡

    ResponderEliminar
  2. Los clientes son unos cabrones! Esque vaya tio... solo le faltó obligarte a pelarle la naranja con cuchillo y tenedor como ya te dije...
    A mí las madres que iban a Zara casi que me exigían que me sacara una camisetita horrenda del coñ* xk no había talla... tendremos nosotros la culpa!!

    ResponderEliminar
  3. yo no quiero ninguno jajaja.

    x cierto mñaa grabamossss

    ResponderEliminar
  4. tú, espero que te hayas olvidado ya de ese cabronazo.

    ResponderEliminar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  6. This is an awesome expression, I can feel it,

    RGratzVM.com

    ResponderEliminar
  7. Pagaría miles de euros por esa camiseta! Jajajaja

    ResponderEliminar